La nueva estrategia política de los demócratas consiste en usar groserías para ganarse a los votantes, después de haber llamado racista y sexista al Presidente Trump y a sus seguidores durante años. La nueva estrategia política de los demócratas consiste en usar groserías para ganarse a los votantes, después de haber llamado racista y sexista al Presidente Trump y a sus seguidores durante años.